Tenemos la costumbre de no valorar todo lo que tenemos (tanto material como no). Nos pasamos la vida deseando conseguir algo y cuando lo tenemos, buscamos otra y otra y otra cosa más.
Tomar la costumbre de echar un vistazo a todo lo que hemos conseguido en la vida, a todo lo que ya tenemos en todos los campos, a nivel personal, de trabajo, amistades, familia, cosas materiales... y sentirnos realmente orgullosos, contentos de lo que ya tenemos.
Parece algo muy obvio pero realmente pocas veces nos paramos a valorar lo que ya tenemos, tenemos la tendencia a centrarnos en lo que nos falta. Por ejemplo, si tenemos un marido sensible, amable, de fácil convivencia, respetuoso...... nos quejamos porque es lento, o porque no se le ocurre hacer en la casa las cosas que tu no quieres hacer o que dás más importancia. Centrarse en los defectos de los demás, al igual que en las cosas que carecemos es un hábito sumamente perjudicial, porque si bien es cierto que para mejorar hay que darse cuenta de lo que nos falta y lo que queremos, debemos partir siempre de lo que ya somos o ya tenemos.
Con los hijos pasa lo mismo, se portan bien durante dos horas y después cuando ya tienen sueño o pasan un rato repunantes ya.... es que estos niños se ponen insoportables, en vez de recordar lo buenos que son habitualmente. Por supuesto, hay que corregir, pero solo la conducta, no se debe decir a un niño que es malo porque en un momento determinado hizo algo que no estaba bien (aviso: se de lo que hablo, tengo dos hijos !pequeños¡). Centrarse en lo majos que son los niños y la pareja ayuda de una manera inimaginable a mejorar la convivencia, al fin y al cabo, nosotros tampoco somos perfectos, ¿no?.
Con el tema material pasa lo mismo, nos enfocamos en los sitios a los que no podemos ir, o las cosas que no podemos comprar, el coche que nos gustaría tener.... en vez de centrarnos en lo que ya tenemos y valorar (el probablemente increible) tipo de vida que tenemos. Sobre este tema y que conste que no me importaría ser escandalosamente rica, hay muchos estudios que demuestran que llegado un punto de bienestar económico (comida, casa y unos mínimos), el hecho de tener más o menos dinero afecta en poco al tema de la felicidad, de hecho la mayor parte de las cosas que nos hacen disfrutar no son caras y se pueden hacer muchas cosas divertidas y agradables sin gastar un duro (conversar, reirse, pasear, hacer deporte, sexo, disfrutar de la naturaleza, hacer algo manual, recordar una película que realmente nos guste, imaginar, soñar despierto o incluso dormido....).
Podemos coger el hábito de valorar lo que ya tenemos enfocándonos en ello cada vez que nos descubramos pensando en lo que no tenemos o incluso podemos acordar un momento del día o una accion para hacerlo. En el libro de "El Secreto", (que cada uno se lea bajo su cuenta y riesgo) dan una idea realmente ingeniosa, lo llaman la piedra del agradecimiento o algo asi, consiste en llevar una piedrecita (puede ser otro objeto pequeño) en el bolso del pantalón o la chaqueta y cada vez que se toca hay que pensar en algo agradable por lo que uno se pueda sentir agradecido y sentir el agradecimiento, realmente me pareció una técnica muy útil e interesante que ayuda a enfocarnos en lo positivo.
Recordad que nos sentimos en funcion de lo que pensamos, no lo dudeis, si os sentis mal es que estais pensando algo que os duele, podeis analizar que es y después cambiar el pensamiento, porque lo que pensamos no tiene porque ser verdad, sólo es algo que pensamos en ese momento y nada más, no nos define. Podemos buscar el razonamiento y después cambiarlo.... y eso, podemos hablar con los demás pero solo lo podremos hacer nosotros.
Un beso, espero que os resulte útil.
viernes, 30 de abril de 2010
jueves, 29 de abril de 2010
Darse cuenta de lo que realmente pensamos
A lo largo de nuestra vida vamos asumiendo una serie de creencias sobre como son las cosas, que asumimos como absolutamente cierta y modelan nuestra conducta y nuestros pensamientos de una manera no consciente. La mayor parte del tiempo nos comportamos rutinariamente, conforme a hábitos y tomamos decisiones rápidamente con poca información. Nuestro cerebro está estructurado para establecer patrones, hábitos, rutinas, tanto en las acciones como en la manera de pensar.
Tenemos en nuestro cerebro un núcleo "duro" de creencias que nos "guía" en la vida cotidiana, son creencias sobre como son las demás personas, como es el mundo, lo que podemos conseguir o no, cómo somos nosotros mismos, que condicionan nuestra vida y nuestras relaciones sociales.
Estas creencias controlaran nuestro comportamiento (si actuamos automáticamente), sin que nos demos cuenta, solemos dar explicaciones del comportamiento a posteriori, porque el ser humano es básicamente un constructor de historias.... y lo hacemos muy bien.
Podemos hacernos conscientes de nuestras creencias, solo tenemos que prestar atención a lo que decimos en determinadas situaciones, lo que para nootros es importante, lo que siempre nos han dicho en la familia....las creencias vienen de nuestro entorno cercano.
Reflexionar sobre temas morales, (realmente porque consideramos algo adecuado o inadecuado y bajo que circunstancias...buscando todo los matices) o culturales (por que una costumbre es mejor que otra, ejemplo los horarios de las comidas...), intentar entender otros puntos de vista... pero sobre todo no contentarse con el porque si, buscar razones para como tienen que ser las cosas nos ayudará a desarrollar un sistema de creencias más racional y que nos ayude más a ser felices, a poder tener mejor concepto de nosotros mismos y de lo que podemos conseguir en la vida.
La mayor parte de las limitaciones son creencias, aunque si bien es cierto que no podemos volar, también es cierto que un austronauta es un ser humano como cualquier otro, (que con una buena situación de oportunidad de base) sobre todo creyó que lo conseguiría.
Existe un artículo en la revista "Mente y Cerebro" nº40/2010 "Sesgos del inconsciente" muy interesante sobre este tema.
También leer algún libro de Albert Ellis donde explica las ideas irracionales que están en la base de algunas patologías (sobre algunas de esas ideas hablaré más adelante en este blog), puede resultar interesante para reflexionar sobre este tema.
Voy a poner un ejemplo de creencia erronea muy vanal: Cuando estaba aprendiendo a cocinar, un día mi madre me dijo que los garbanzos debían ponerse en remojo en agua caliente y a cocer sin sal o no cocerían, las alubias se ponen en remojo en agua fría y se ponen a cocer con sal porque sino no cuencen..... bien, durante un tiempo lo hice así, pero como soy muy despistada y suelo tener prisa con el tema de la cocina, en varias ocasiones me equivoqué y .... tanto los garbanzos como las alubias cocían igual (y me salen muy ricos), así que ...pongo los dos en agua fría a remojo y los cuezo con sal....
Muchas de las cosas que hacemos son pura manía, pensando un poco podemos ir dándonos cuenta de lo que realmente importa y lo que no son más que diferentes maneras de hacerlo.
Tenemos una tendencia natural a establecer relaciones de cuasa-efecto, está en la base del aprendizaje y esto podría explicar porque a veces generamos creencias tan sofisticadas sobre como hacer las cosas, pero siempre podemos usar nuestra capacidad de pensar y analizar para evaluar nuestras creencias, hábitos, acciones....
Tenemos en nuestro cerebro un núcleo "duro" de creencias que nos "guía" en la vida cotidiana, son creencias sobre como son las demás personas, como es el mundo, lo que podemos conseguir o no, cómo somos nosotros mismos, que condicionan nuestra vida y nuestras relaciones sociales.
Estas creencias controlaran nuestro comportamiento (si actuamos automáticamente), sin que nos demos cuenta, solemos dar explicaciones del comportamiento a posteriori, porque el ser humano es básicamente un constructor de historias.... y lo hacemos muy bien.
Podemos hacernos conscientes de nuestras creencias, solo tenemos que prestar atención a lo que decimos en determinadas situaciones, lo que para nootros es importante, lo que siempre nos han dicho en la familia....las creencias vienen de nuestro entorno cercano.
Reflexionar sobre temas morales, (realmente porque consideramos algo adecuado o inadecuado y bajo que circunstancias...buscando todo los matices) o culturales (por que una costumbre es mejor que otra, ejemplo los horarios de las comidas...), intentar entender otros puntos de vista... pero sobre todo no contentarse con el porque si, buscar razones para como tienen que ser las cosas nos ayudará a desarrollar un sistema de creencias más racional y que nos ayude más a ser felices, a poder tener mejor concepto de nosotros mismos y de lo que podemos conseguir en la vida.
La mayor parte de las limitaciones son creencias, aunque si bien es cierto que no podemos volar, también es cierto que un austronauta es un ser humano como cualquier otro, (que con una buena situación de oportunidad de base) sobre todo creyó que lo conseguiría.
Existe un artículo en la revista "Mente y Cerebro" nº40/2010 "Sesgos del inconsciente" muy interesante sobre este tema.
También leer algún libro de Albert Ellis donde explica las ideas irracionales que están en la base de algunas patologías (sobre algunas de esas ideas hablaré más adelante en este blog), puede resultar interesante para reflexionar sobre este tema.
Voy a poner un ejemplo de creencia erronea muy vanal: Cuando estaba aprendiendo a cocinar, un día mi madre me dijo que los garbanzos debían ponerse en remojo en agua caliente y a cocer sin sal o no cocerían, las alubias se ponen en remojo en agua fría y se ponen a cocer con sal porque sino no cuencen..... bien, durante un tiempo lo hice así, pero como soy muy despistada y suelo tener prisa con el tema de la cocina, en varias ocasiones me equivoqué y .... tanto los garbanzos como las alubias cocían igual (y me salen muy ricos), así que ...pongo los dos en agua fría a remojo y los cuezo con sal....
Muchas de las cosas que hacemos son pura manía, pensando un poco podemos ir dándonos cuenta de lo que realmente importa y lo que no son más que diferentes maneras de hacerlo.
Tenemos una tendencia natural a establecer relaciones de cuasa-efecto, está en la base del aprendizaje y esto podría explicar porque a veces generamos creencias tan sofisticadas sobre como hacer las cosas, pero siempre podemos usar nuestra capacidad de pensar y analizar para evaluar nuestras creencias, hábitos, acciones....
miércoles, 28 de abril de 2010
Disfrutar del ahora
Nos pasamos la vida preparando el futuro o pensando en el pasado. La mayor parte del tiempo estamos proyectándonos en otro momento temporal. Ej: cuando los niños crezcan, cuando tenga un buen trabajo, cuando tenga tiempo, cuando tenga dinero.... y así nos olvidamos de vivir el presente, que por cierto, es el único momento que realmente podemos vivir.
Si bien no tiene nada de malo recordar nuestro pasado (ojo, regodearse en momentos duros o situaciones traumáticas lo único que conseguirá será hacernos pasar un mal rato para nada porque no hay nada que podamos cambiar). Tampoco tiene nada de malo hacer planes para el futuro.
Pero vivir el presente habitualmente es la mejor opción para ser feliz, disfrutar de cada momento, de las actividades que se están haciendo. Si se está trabajando intentar encontrar lo que realmente te hace disfrutar, a mi normalmente me resulta muy sencillo ya que me encanta mi trabajo, aunque también puedo decir que suelo disfrutar de casi cualquier cosa que me pongo hacer (aunque sea por obligación, siempre busco estar lo más cómoda posible), por ejemplo, lo que menos me gusta es planchar, cuando tengo dinero, mando a alguien que lo haga, pero sino, si lo tengo que hacer yo pues pongo música que me gusta y canto mientras plancho o pongo una serie de risa.... busco hacerlo lo más agradable posible y por supuesto pienso en lo guapa que queda la ropa después.
Disfrutar de cada momento de tu vida, por la mañana cuando te levantas disfrutar de que empieza un nuevo día y la incertidumbre de no controlarlo todo y tener toda la energía, cuando vás a trabajar (yo voy en autobús, unas veces leo, otras veo el paisaje, a veces charlo con alguien y otras veces simplemente voy pensando en cosas agradables, si me pillo pensando algo que me preocupa me centro en disfrutar de el viaje y del paisaje).
Normalmente no disfrutamos del presente porque estamos pensando, sin parar, todo el tiempo... una técnica para dejar de pensar centrar la atención en lo que estás pensando, vendría a ser algo como: "voy a ver que es lo que pienso"... esto normalmente deja la mente en blanco, suele ser un ...pues... no pienso nada... nada.... no pienso nada.... hay que ver con todo lo que estaba pensando hasta ahora...
Bien se suele aguantar sin pensar nada poco tiempo pero cada vez que se centre la atención seguramente que no pensaremos en nada y.... eso es tan relajante.
Otra técnica es expulsar todo el aire y después respirar lenta y profundamente, mientras tanto imaginarnos el aire recorriendo todo el cuerpo, iremos centrando la atención en cada parte de nuesto cuerpo y haciéndonos realmente conscientes de nuestro cuerpo.
Durante una época que estaba nerviosa, a veces por la noche me despertaba y con las preocupaciones no podía dormir, una técnica que me ayudaba mucho era centrarme en la sensación de bienestar tan grande que tenía por estar en la cama, calentita, sentía mis pies, mis piernas, mis brazos, mi barriga... y buscaba la sensación de bienestar y de agradecimiento por tener esa cama tan cómoda... me volvía a dormir rápidamente cuando lo hacía.
Centrar la atención en el presente ayuda a sentirse más feliz, a ser más consciente de estar vivo y se ve la vida desde otra perspectiva, más despacio, sin prisa, disfrutando. Os animo a probarlo, sólo es un cambio de actitud
Si bien no tiene nada de malo recordar nuestro pasado (ojo, regodearse en momentos duros o situaciones traumáticas lo único que conseguirá será hacernos pasar un mal rato para nada porque no hay nada que podamos cambiar). Tampoco tiene nada de malo hacer planes para el futuro.
Pero vivir el presente habitualmente es la mejor opción para ser feliz, disfrutar de cada momento, de las actividades que se están haciendo. Si se está trabajando intentar encontrar lo que realmente te hace disfrutar, a mi normalmente me resulta muy sencillo ya que me encanta mi trabajo, aunque también puedo decir que suelo disfrutar de casi cualquier cosa que me pongo hacer (aunque sea por obligación, siempre busco estar lo más cómoda posible), por ejemplo, lo que menos me gusta es planchar, cuando tengo dinero, mando a alguien que lo haga, pero sino, si lo tengo que hacer yo pues pongo música que me gusta y canto mientras plancho o pongo una serie de risa.... busco hacerlo lo más agradable posible y por supuesto pienso en lo guapa que queda la ropa después.
Disfrutar de cada momento de tu vida, por la mañana cuando te levantas disfrutar de que empieza un nuevo día y la incertidumbre de no controlarlo todo y tener toda la energía, cuando vás a trabajar (yo voy en autobús, unas veces leo, otras veo el paisaje, a veces charlo con alguien y otras veces simplemente voy pensando en cosas agradables, si me pillo pensando algo que me preocupa me centro en disfrutar de el viaje y del paisaje).
Normalmente no disfrutamos del presente porque estamos pensando, sin parar, todo el tiempo... una técnica para dejar de pensar centrar la atención en lo que estás pensando, vendría a ser algo como: "voy a ver que es lo que pienso"... esto normalmente deja la mente en blanco, suele ser un ...pues... no pienso nada... nada.... no pienso nada.... hay que ver con todo lo que estaba pensando hasta ahora...
Bien se suele aguantar sin pensar nada poco tiempo pero cada vez que se centre la atención seguramente que no pensaremos en nada y.... eso es tan relajante.
Otra técnica es expulsar todo el aire y después respirar lenta y profundamente, mientras tanto imaginarnos el aire recorriendo todo el cuerpo, iremos centrando la atención en cada parte de nuesto cuerpo y haciéndonos realmente conscientes de nuestro cuerpo.
Durante una época que estaba nerviosa, a veces por la noche me despertaba y con las preocupaciones no podía dormir, una técnica que me ayudaba mucho era centrarme en la sensación de bienestar tan grande que tenía por estar en la cama, calentita, sentía mis pies, mis piernas, mis brazos, mi barriga... y buscaba la sensación de bienestar y de agradecimiento por tener esa cama tan cómoda... me volvía a dormir rápidamente cuando lo hacía.
Centrar la atención en el presente ayuda a sentirse más feliz, a ser más consciente de estar vivo y se ve la vida desde otra perspectiva, más despacio, sin prisa, disfrutando. Os animo a probarlo, sólo es un cambio de actitud
martes, 27 de abril de 2010
2- Amarse a uno mismo
Tenemos la costumbre de dejar en manos de los demás la valoración sobre como somos, cada persona puede tener una idea diferentes sobre nosotros, unos la tendrán muy buena y otros la tendrán muy mala y será algo sobre lo que no tendremos ningún control.
Si nos amamos y respetamos a nosotros mismos, nos aceptamos tal como somos, con nuestras fortalezas y debilidades podremos vivir nuestra vida con libertad porque seremos nosotros los que elegimos que es lo que realmente queremos. Existen muchas formas en que los demás nos pueden presionar para que actuemos de una forma u otra, haciéndonos sentir culpables, con chantaje emocional... y si lo permitimos nos estamos faltando al respeto.
Somos responsables de lo que hacemos y decimos nosotros, no de los demás, así que somos nosotros los que tenemos que tomar nuestras propias decisiones.
Lo importante realmente es que nos aceptemos nosotros a nosotros mismos y nos amemos, así podremos vivir la vida plenamente y ser realmente felices, viviremos con la tranquilidad de que nuestras decisiones son nuestras, tanto si acertamos como si no, solo tenemos que rendir cuentas a nosotros mismos. Cuado hagamos algo por los demás será un elección dentro del amor, no una obligación y no nos resultará desagradable.
Si nos amamos y respetamos a nosotros mismos, nos aceptamos tal como somos, con nuestras fortalezas y debilidades podremos vivir nuestra vida con libertad porque seremos nosotros los que elegimos que es lo que realmente queremos. Existen muchas formas en que los demás nos pueden presionar para que actuemos de una forma u otra, haciéndonos sentir culpables, con chantaje emocional... y si lo permitimos nos estamos faltando al respeto.
Somos responsables de lo que hacemos y decimos nosotros, no de los demás, así que somos nosotros los que tenemos que tomar nuestras propias decisiones.
Lo importante realmente es que nos aceptemos nosotros a nosotros mismos y nos amemos, así podremos vivir la vida plenamente y ser realmente felices, viviremos con la tranquilidad de que nuestras decisiones son nuestras, tanto si acertamos como si no, solo tenemos que rendir cuentas a nosotros mismos. Cuado hagamos algo por los demás será un elección dentro del amor, no una obligación y no nos resultará desagradable.
lunes, 26 de abril de 2010
1- pensar tres cosas agradables que nos hayan pasado hoy antes de dormir
Estamos más acostumbrados a pensar en lo negativo que en lo positivo, solemos pensar en lo malo que nos ha pasado y en muchas ocasiones nos olvidamos que a lo largo del día nos pasa de todo, tanto bueno como malo.
Hacer un esfuerzo consciente por pensar en tres cosas agradables que nos hayan pasado durante el día (sobre todo si se hace por la noche antes de dormir) ayuda a relajarse y a dormir mejor, acostarse preocupados por algo es la mejor garantía de despertarse agobiado durante la noche, pero si centramos la atención en algo agradable nuestro sueño será más tranquilo, placentero y reparador.
Nos sentimos en función de lo que estamos pensando, si esta pensando en algo agradable nos sentiremos bien y así tendremos más energía, los sentimientos positivo nos dan fuerza, los negativos nos la quitan.
Pensar tres cosas agradables antes de dormir es una manera eficaz de relajarse para conciliar el sueño y tener una noche tranquila. Si despertasemos por la noche siempre podremos volver a centrar la atención en estas tres cosas.
1001 ideas para ser feliz
¿Qué puede haber en la vida más importante que disfrutarla?
¿Por qué escribir un blog sobre ideas para ser feliz?
La verdad, por puro egoismo, como yo soy feliz y me lo paso bien, me gustaría mucho que los demás también fueran felices y se lo pasasen bien.
Estar con gente feliz y divertida es realmente agradable, así que si puedo hacer que alguien sea más feliz pues... ¿Por qué no?
Ser feliz es una actitud, una opción, la felicidad está dentro de nosotros y depende de lo que nosotros pensemos y hagamos.... luego..... se puede aprender y en el proceso se lo pasa uno bien.
Voy a intentar dar 1001 ideas sencillas, cotidianas y fáciles para ser más felices, espero que os resulten útiles
¿Por qué escribir un blog sobre ideas para ser feliz?
La verdad, por puro egoismo, como yo soy feliz y me lo paso bien, me gustaría mucho que los demás también fueran felices y se lo pasasen bien.
Estar con gente feliz y divertida es realmente agradable, así que si puedo hacer que alguien sea más feliz pues... ¿Por qué no?
Ser feliz es una actitud, una opción, la felicidad está dentro de nosotros y depende de lo que nosotros pensemos y hagamos.... luego..... se puede aprender y en el proceso se lo pasa uno bien.
Voy a intentar dar 1001 ideas sencillas, cotidianas y fáciles para ser más felices, espero que os resulten útiles
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